Alergias e intolerancias: un compromiso serio que marca la diferencia en nuestros talleres y eventos

En La Patente creemos que la cocina es mucho más que sabor, creatividad o tradición. La cocina es salud, bienestar y, sobre todo, una cuestión de respeto y responsabilidad. Por eso, en cada evento o curso que organizamos, tomamos con absoluta seriedad un aspecto fundamental que muchas veces se pasa por alto o se trata de manera superficial: las alergias e intolerancias alimentarias.

Un desafío que requiere profesionalismo y compromiso

Sabemos que atender correctamente las alergias e intolerancias no es solo una cuestión de incluir algún plato alternativo en el menú. Se trata de un proceso riguroso que requiere preparación, atención al detalle y protocolos estrictos para evitar cualquier tipo de error.

Desde hace tiempo hemos desarrollado un sistema de trabajo que incluye, desde la planificación, la compra, el almacenamiento y la preparación de alimentos, hasta la comunicación directa con los participantes. Así nos aseguramos que todas las restricciones alimentarias sean conocidas, respetadas y, sobre todo, que se cumplan sin excepción.

¿Por qué es tan importante no banalizar las alergias e intolerancias?

El panorama alimentario ha cambiado mucho en los últimos años. Cada vez más personas eligen evitar ciertos alimentos, no solo por preferencias personales sino por verdaderas necesidades médicas o éticas. Por ejemplo, la intolerancia a la lactosa, la alergia a los frutos secos o la celiaquía afecta a un porcentaje creciente de la población. Y esto exige que quienes cocinamos para grupos o empresas somos absolutamente responsables.

Un pequeño descuido puede tener consecuencias graves para la salud, por eso en La Patente no dejamos nada a la improvisación. No se trata solo de sustituir ingredientes o crear opciones veganas o sin gluten; hablamos de protocolos claros, formación continua y un compromiso real con la seguridad alimentaria.

En este sentido, somos inclusivos, tolerantes y, siempre que es viable, damos mucha importancia a atender las necesidades alimentarias de los asistentes a nuestros eventos. Tanto es así que hemos creado un menú Plant Based (vegano, sin gluten, sin lactosa, apto para personas que no comen cerdo… un menú divertido, sabroso y que no deja a nadie indiferente) que ofrecemos a las empresas en su elección del menú.

No obstante, en ocasiones, los menús especiales elaborados para atender necesidades específicas pueden no ser finalmente consumidos debido a circunstancias sobrevenidas durante el desarrollo del evento. Esta situación puede derivar en desperdicio de alimentos y en el uso innecesario de recursos, tiempo y atención que se han destinado para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los asistentes.

La importancia de preguntar y personalizar

Cada vez que organizamos un taller o curso, preguntamos explícitamente por cualquier tipo de alergia, intolerancia o restricción dietética. Lo hacemos porque sabemos que no podemos asumir nada y porque queremos que todos los participantes se sientan seguros y bien cuidados.

Por ejemplo, hoy en día muchas personas evitan el queso o prefieren leche de soja en lugar de leche entera. Son decisiones que debemos respetar sin cuestionamientos. Pero al mismo tiempo, pedimos responsabilidad por parte de los asistentes, porque atender cada necesidad implica recursos, tiempo y atención que merecen ser valorados.

Así, diseñamos nuestros menús y recetas para que nadie quede fuera ni tenga que conformarse con “algo parecido” o “una alternativa improvisada”.

Este nivel de personalización y cuidado es algo que pocas empresas de team building o talleres de cocina ofrecen, y creemos que es lo que realmente hace la diferencia.

Protocolo estricto: mucho trabajo, pero resultados que se notan

El respeto por las alergias e intolerancias alimentarias implica un trabajo extra considerable. Desde la selección de proveedores confiables, la gestión de compras, la correcta manipulación en cocina y hasta la limpieza rigurosa para evitar contaminaciones cruzadas. Nuestro equipo está capacitado y sensibilizado para manejar estas situaciones con la máxima profesionalidad.

Es cierto que este proceso lleva más tiempo y esfuerzo pero hacerlo bien significa evitar riesgos, reducir desperdicios y ofrecer experiencias gastronómicas donde todos pueden disfrutar sin miedo ni excepciones.

Más que un requisito, un valor diferencial

Para nosotros, respetar las alergias e intolerancias no es solo cumplir con la normativa o evitar riesgos legales. Es un valor que forma parte de nuestra filosofía.
Creemos que la cocina debe ser un espacio de encuentro, diversión e inclusión, pero también de coherencia y respeto por el trabajo que implica atender necesidades especiales. No se trata de poner un plato diferente “por si acaso”, sino de garantizar que cada persona que lo reciba lo necesite realmente.

Este compromiso es parte de lo que nos diferencia y hace que nuestros talleres, cursos y eventos sean experiencias únicas, donde todos pueden disfrutar sin preocupaciones.

¿Quieres un evento o taller gastronómico seguro y personalizado?

Si en tu empresa o grupo hay personas con alergias o intolerancias, no dejes al azar un aspecto tan importante. En La Patente te ofrecemos no solo un taller de cocina, sino una experiencia cuidada hasta el último detalle, donde cada participante puede cocinar, compartir y disfrutar con total tranquilidad.

Personalización, inclusión y responsabilidad: así es como entendemos la gastronomía en La Patente.

Contáctanos y descubre cómo adaptamos cada experiencia para que todos puedan formar parte, sin miedo ni limitaciones.