Despensa a punto! Consejos prácticos para mantener en orden tu cocina

Tips sencillos para ahorrar tiempo, espacio… y hasta dinero

¿Y si te dijéramos que la manera en la que organizas tu despensa puede cambiar tu día a día? A veces no somos conscientes del caos hasta que abrimos la puerta del armario y nos encontramos con varios paquetes abiertos, conservas duplicadas, y un sinfín de productos apilados sin orden ni concierto.

Quizás lo tuyo no es el orden (¡todavía!), quizás vas con prisas al guardar la compra, o tal vez sois varias personas en casa y cada una coloca las cosas donde le parece… Sea cual sea tu caso, hoy queremos ayudarte a poner fin al desorden con una serie de tips prácticos y sencillos para tener una despensa funcional, bonita y eficiente.

Porque en La Patente sabemos que la cocina empieza mucho antes de encender el fuego: empieza en el orden, la planificación y el gusto por cuidar cada detalle.

Empezamos desde cero: vacía y limpia

Antes de organizar, toca hacer limpieza a fondo. Saca todo el contenido de tu despensa, pasa un paño húmedo (¡con vinagre va genial!) y revisa producto por producto.

• Tira lo que esté caducado.
• Revisa paquetes abiertos: si están blandos, secos o huelen raro… a la basura.
• Haz un inventario, visual o escrito. Te ayudará a tomar conciencia de lo que tienes y a no comprar de más la próxima vez.

Este primer paso ya te dará una sensación de orden mental. ¡Y eso también se nota al cocinar!



Que se vea todo (¡y bien!)

Uno de los errores más comunes en las despensas es no ver lo que hay al fondo. Por eso, nuestro consejo estrella es:

👉 Utiliza envases transparentes para productos a granel como legumbres, arroz, cereales, pasta, frutos secos o harinas.
👉 Asegúrate de poner etiquetas claras: contenido y fecha de consumo preferente.

Los frascos de cristal o de plástico sin BPA son ideales. Puedes unificar estilos para darle también un toque visual más armónico.

El arte de cerrar bien

Si decides conservar los alimentos en sus paquetes originales, asegúrate de cerrarlos lo mejor posible:

• Pinzas de cocina
• Gomas elásticas
• Grapadora
• Film transparente o reutilizable

Evitarás que el producto se reseque o se estropee, y alargarás su vida útil. ¡Un gesto simple que marca la diferencia!

Orden lógico por categorías

Una despensa funcional no es aquella que se ve bonita en Instagram (aunque también ayuda), sino la que te permite encontrar todo fácilmente.

Aquí algunas claves:

• Agrupa por tipo de producto:
  • Cereales y pastas
  • Salsas y conservas
  • Aceites, vinagres y aliños
  • Legumbres y arroces
    
• Dedica un espacio exclusivo al universo del desayuno: café, infusiones, miel, mermeladas, tostadas, bollería, chocolate…
• Si eres fan de las especias, guárdalas todas juntas en un cajón o estante exclusivo. ¡Y mejor si están organizadas alfabéticamente!
  

Esta organización te ayudará a cocinar con más fluidez y evitará compras repetidas o innecesarias.

Juega con la altura: orden inteligente

Piensa en la lógica de uso para decidir qué va arriba y qué va abajo:

• Nivel superior: lo menos utilizado o productos de larga duración (harinas especiales, repostería, conservas para “por si acaso”).
• Nivel medio o a la vista: lo de uso diario, lo que necesitas tener siempre a mano.
• Nivel inferior: lo que más pesa (packs de agua, leche, caldos, bebidas).
  

Este tipo de organización también te cuida físicamente: evitas subirte a sillas o cargar innecesariamente.

Etiquetas: tus mejores aliadas

No subestimes el poder de una buena etiqueta. Puedes usar:

• Pegatinas adhesivas
  Cintas washi
• Etiquetas tipo pizarra (reutilizables)
• Rotuladores permanentes
  

Aparte de identificar qué hay en cada bote, dan un aire cuidado y profesional a tu despensa. Y ya sabes que cuando un espacio es bonito, da más gusto usarlo.


Ordenar la despensa es regalarte tiempo (y tranquilidad)

Un espacio ordenado no solo se ve mejor: se vive mejor. Cocinas con más calma, aprovechas mejor los ingredientes, haces compras más conscientes y, lo más importante, disfrutas más del proceso.

En La Patente, creemos que cocinar empieza mucho antes de mancharse las manos. Empieza en esos pequeños gestos cotidianos que hacen que tu cocina sea un lugar cómodo, eficiente y agradable.

¿Te animas a darle un nuevo aire a tu despensa?

Hazlo como un ritual, dedícale un rato, pon tu música favorita y verás cómo el orden también se saborea.